Lo que el viento se llevó

Cartas de Amor a Nicaragua, Por Fabio Gadea Mantilla

Querida Nicaragua: Don Daniel realmente es un presidente único en nuestra historia.Es tan grande la repulsión que siente por los norteamericanos, que siente gozo cuando los humilla. Y digo esto porque es una humillación para los Estados Unidos que don Daniel rechace continuar recibiendo la donación de la Cuenta Reto del Milenio que ha favorecido a tantos y ha hecho trabajos excelentes en el occidente del país.

Como si ambos no fuesen imperios, Estados Unidos y Rusia, don Daniel acepta encantado comprarle doscientos carros Lada, de pésima recordación por su mala calidad, y cien autobuses rusos, inapropiados para nuestro clima, ya que no resisten los calores del trópico, pero no recibe gratuitamente las enormes ventajas de la cuenta Reto del Milenio. No le interesa, la desprecia, sin importarle el bien que puedan recibir los habitantes de León y Chinandega.

Seguramente don Daniel está esperando todavía los cincuenta millones de dólares que le ofreció Chávez para continuar los programas de la Cuenta Reto del Milenio que le cortaron los norteamericanos a causa del enorme fraude de noviembre de 2008.

Nada extraña la actitud de don Daniel para quien todo lo que huela a gringo está contaminado de imperialismo y burguesía. Lo que realmente extraña es la actitud de un país serio como los Estados Unidos, que, como si fuese el ofendido, casi le suplicó a don Daniel que solicitara la continuación de la mencionada cuenta y que ellos la aprobarían cuanto antes.

Es decir, que en noviembre del 2008 reaccionan en contra del descarado fraude que hizo Ortega y lo castigan cortando la cuenta Reto del Milenio, pero ahora, dos años más tarde, se les olvidó el fraude, se hacen de la vista gorda ante el irrespeto de Ortega a la Constitución del país, no quieren ver todo lo que don Daniel está haciendo para postularse por la fuerza como candidato a la presidencia, no les interesa que aquí no haya estado de derecho, no ven el desastre de los poderes del Estado y le ruegan al gobierno al que antes castigaron, que reciba la donación que le están ofreciendo y que había sido cortada. Y encima dicen que es para ayudar a la oposición política.

Absolutamente contradictorio. Recordamos con dolor los abusos incalificables que cometieron los norteamericanos en el siglo pasado, toda la prepotencia cuando quitaban y ponían presidentes en estas regiones, pero todo eso se acabó. Ellos pasaron del intervencionismo más condenable a la indolencia también censurable. La prepotencia que ponía en Corinto una cañonera y amenazaba con liquidar cualquier amago de revolución, aquella arrogancia del todopoderoso imperio es algo así como “Lo que el viento se llevó”, la famosa novela de Margaret Mitchel que fue llevada al cine con el inolvidable Clark Gable y la bellísima Vivian Leigh. Los Estados Unidos, los potentes y grandes que cantó Rubén en su oda a Roosevelt, humillados cien años después por Daniel Ortega, presidente de Nicaragua.

Lo que estamos viendo es único en la historia. Los gringos no soportaban a ningún dictador, sólo a aquellos que les cuidaran las espaldas por la amenaza del odiado comunismo. Hoy en día los dictadores como Chávez, Evo Morales, Rafael Correa, Daniel Ortega y ya no digamos el otoñal dictador y dinasta del Caribe, Fidel y su hermanísimo Raúl se ríen a carcajadas de los pobres gringos. ¿No es esto algo para Ripley? Yo creo que sí.