Buscar este blog

lunes, 31 de enero de 2011

Los derechos humanos no son un privilegio de países ricos y desarrollados: Thierry Frayssé, Embajador de Francia


Buenas noches Sras y Sres.:

Tengo esta noche el inmenso placer, honor, y privilegio de condecorar ante ustedes con la Orden de la Legión de Honor, en grado de Caballero, a la Doctora Vilma Núñez de Escorcia, Presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos.

Me siento muy emocionado y conmovido de poder recompensar hoy, con esta insignia, otorgada por el propio presidente de la Republica Francesa, Nicolas Sarkozy, su notable labor nacional e internacional en pro de la defensa de los Derechos Humanos.


La Orden de la Legión de Honor, creada por el Emperador Napoleón en 1802, es la más alta Condecoración francesa, y puede ser otorgada a todos sin distinción de nacionalidad, pues distingue los « méritos eminentes » de la persona que la recibe.

Esta orden comprende tres grados, Caballero, Oficial, Comandante y dos dignidades, Gran Oficial y Gran Cruz.

La Dra. Vilma Núñez de Escorcia es promovida al grado de « Caballero », que constituye el grado de entrada en la Orden de la Legión de Honor. Por su gran experiencia, ella es considerada como una figura mayor en la defensa de los Derechos Humanos en Nicaragua y en el mundo.

Uno no puede más que saludar y admirar la formidable labor de la Dra. Vilma Núñez de Escorcia, quien desde hace mas de 40 años es abogada, especialista en  Derecho Penal y Derechos Humanos.

Nacida el 25 de noviembre de 1938 en Acoyapa, departamento de Chontales, no era más que una niña cuando su padre fue arrestado por la Guardia nacional de  Somoza. Este evento fue determinante en su decisión de consagrarse a la lucha por la defensa de los Derechos Fundamentales.

En 1958, ella fundó el “Primer comité pro-libertad” de los universitarios  prisioneros políticos, y defendió de manera gratuita a los acusados políticos, perseguidos por la dictadura de Somoza.

En 1969, se convierte en la primera mujer magistrada en la sala penal del Tribunal de apelaciones de León.

Vilma Núñez fue encarcelada y torturada por el régimen somocista. Mientras guardaba prisión fue nombrada primera vice-presidenta de la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua, después de la caída de la dictadura y el triunfo de la revolución de julio de 1979.

Promovida a  responsable de la Comisión Nacional por los Derechos Humanos y Asuntos Humanitarios en 1987, ella renunció a ese puesto para  fundar en 1990 un organismo independiente, el Centro Nicaraguense de Derechos Humanos (CENIDH), del cual es presidenta del Consejo Directivo desde el año 2003.

Determinación en la defensa de los derechos humanos
Su determinación se manifiesta en el eslogan del CENIDH, « derecho que se no se defiende…es derecho que se pierde », por eso la Dra. Núñez de Escorcia se implica personalmente y con dinamismo como mediadora en conflictos sociales y políticos, particularmente en la defensa de los derechos humanos de manera integral, tanto de los derechos civiles y políticos como de los derechos económicos, sociales y culturales.

Habiendo ejercido el cargo de Vicepresidenta de la Federación Internacional de Derecho Humanos, cuya sede se encuentra en Paris, en el periodo comprendido de 2001 a 2009,  actualmente se desempeña como representante de la FIDH ante la Organización de Estados Americanos.

Entre los numerosos premios y nominaciones con que ya se la ha distinguido cabe mencionar en particular:

1994.- Premio de Derechos Humanos Leonidas Proaño otorgado por la Asociación Latinoamericana de Derechos Humanos (ALDHU).

1998.- “Premio de las 100 heroínas” otorgado en conmemoración al 150 aniversario del congreso por los Derechos Humanos de las Mujeres, celebrado en Estados Unidos.

2003.- Premio Shalom otorgado a la Dra. Vilma Núñez y al  CENIDH por la Universidad Católica Eichstatt-Ingolstadt, de Alemania como reconocimiento a su labor y compromiso por la paz y la justicia en Nicaragua.

2005.- Fue nominada entre 1000 mujeres para el “Premio Nobel de la Paz”

2005.- Recibe la Orden Cultural de Paz “Martín Luther King” otorgada por el Instituto de Investigación y Acción  Social de la Universidad Politécnica de Nicaragua (UPOLI)

Con esta entrega de la Orden de la Legión de Honor, Francia quiere recompensar la labor eminente de la Dra. Vilma Núñez de Escorcia, y más allá de su persona al conjunto de los actores nicaragüenses que militan en favor de los Derechos Humanos tanto en el CENIDH como en otras organizaciones. Pienso que es necesario recalcar la importancia de esta lucha que desgraciadamente es todavía de actualidad en varios países.

Derechos humanos conforman un conjunto integral y universal

Nicaragua, al igual que Francia, es signatario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, es por eso que Francia se siente muy orgullosa de destacar los grandes esfuerzos de todos los nicaragüenses en términos de la defensa de los Derechos Humanos a través de esta condecoración.

Nuestra convicción es que los derechos humanos conforman un conjunto integral y verdaderamente universal. No se puede disgregar estos derechos, sean políticos, de libertad de consciencia, de expresión, o de religión; derechos ligados al género, económicos o sociales. Sabemos que algunos regímenes promueven una libertad formal, olvidándose de las condiciones económicas y sociales de los pueblos. Otros, al contrario, toman pretexto de sus éxitos económicos para mantener varias formas de autoritarismos. Además, muchos gobiernos alegan que uno u otro de los derechos humanos no son prioridades: siempre hay algo mas urgente que resolver antes – la crisis económica, la seguridad o la supuesta inmadurez de las sociedades – para no ponerlos en práctica.

Decididamente no, los derechos humanos nos son un privilegio de países ricos y desarrollados. Las violencias, la falta de libertad duelen de la misma manera, en todas partes del mundo. Tampoco valen los relativismos de valores, que muchas veces esconden meros intereses políticos, patriarcales o económicos, para impedir una aplicación integral y universal de los derechos humanos. Al respecto las sociedades son muchas veces más maduras y avanzadas que las propias autoridades.

Para terminar, quisiera destacar que con el otorgamiento de esta distinción el propósito de Francia no es dar lecciones. Por supuesto, Francia se precia de ser la patria de los derechos humanos: la declaración de los derechos del Hombre nació en los albores de la revolución francesa de 1789, y la declaración universal de los derechos humanos se firmó en Paris en 1948, en el marco de la naciente organización de las naciones Unidas. Este ideal a favor de los derechos humanos es genuino y compartido profundamente por el pueblo francés, pero sabemos muy bien que la realidad a veces no está a la  altura de este ideal y que también en nuestro propio país la situación de los derechos humanos es mejorable en muchos aspectos.

Entonces, el significado de esta condecoración es expresar nuestra profunda admiración y nuestro reconocimiento a una hermana totalmente entregada a la defensa de un ideal común.

Nuestro agradecimiento por su labor refleja la convicción de que luchando a favor de los derechos humanos en Nicaragua, Doña Vilma defiende los derechos humanos de todos nosotros, en el mundo.

Muchas gracias 

* Mensaje del señor Embajador de Francia, Thierry Frayssé, durante la entrega oficial de  la Orden de la Legión de Honor, en grado de Caballero, a la Doctora Vilma Núñez de Escorcia, Presidenta del Centro Nicaraguense de Derechos Humanos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario